Esta mañana hemos desayunado con Silvia, y me ha estado explicando la visita a un proyecto de barrio ecológico que están haciendo en un pueblo cerca de Toulouse, parece que un proyecto interesante. Entonces se me ha ocurrido explicarle una idea que me vino a la cabeza el otro día leyendo el periódico, aquellas veces que lees algo y empiezas a hacer brainstorming.
El domingo pasado venía en La Vanguardia papel (no lo he encontrado en la digital) que el carguero Samy lleva cinco años abandonado en el puerto de Barcelona por un lío de propietarios. Me llamó la atención que el barco, que es mayor que esos enormes yates que a veces atracan junto al Maremagnum, se subastó hace dos años por 124.198 euros (claro que está hecho una mierda). El caso es que si un barco ha podido estar atracado allí cinco años sin ningún uso ¿porqué no utilizar el espacio del puerto para atracar un barco en mejores condiciones (y más grande) y alquilar los camarotes como viviendas? En Barcelona hay un problema grave y urgente por la falta de viviendas baratas de alquiler, y esto estaría en la línea de lo que hicieron hace años en Amsterdam con las barcazas-vivienda en los canales, pero a lo grande. Aquí no tenemos canales pero tenemos puerto. A Silvia no le ha parecido mala idea.
Pues siguiendo con el brainstorming, lo más adecuado sería que un proyecto así lo llevara a cabo el Ayuntamiento dentro de su programa de viviendas de protección oficial (VPO), como iniciativa particular resultaría mucho más complicado por la inversión inicial, los permisos, etc. He estado echando un vistazo al Plan de Vivienda 2004-2010 del Ayuntamiento. En la primera fase del plan, 2004-2007, estaba previsto edificar 10.332 viviendas con una inversión de unos 1000 millones de euros. En noviembre del año pasado Xavier Casas, entonces primer teniente de alcalde, declaraba:
Casas aseguró el compromiso del Ayuntamiento de Barcelona es ofrecer “al año 2. 500 nuevos viviendas de protección oficial anuales, de las cuales 500 serían para vecinos afectados por procesos de realojo”. La intención es alcanzar los 9.000 pisos de protección oficial de 2008 a 2010, según el primer teniente de alcalde. Actualmente, un total de 70.000 barceloneses ya se han dirigido a las oficinas de vivienda y a través de Internet para solicitar información sobre la oferta de pisos de protección existente en Barcelona, explicó Casas.
Bueno, con estos datos en la mano me he puesto a buscar como está el mercado de barcos de pasajeros de segunda mano para ver si la idea podía ser factible, al menos económicamente. Lo primero que he encontrado es el el transatlántico inglés Queen Elizabeth 2, de 294 metros de eslora y capacidad para 1.700 pasajeros y 1.015 tripulantes (un monstruo de lujo) ha sido vendido a Dubai por 50 millones de libras (+ o – 75 millones de euros) para convertirlo en hotel flotante. Vaya, vamos bien, si un barco puede convertirse en un hotel, tambien puede convertirse en un bloque de viviendas, no todo ha de ser para los turistas. Si dividimos las camas entre 3 (para no hacer corto) salen unos 900 camarotes/viviendas con un coste de 8.333 euros por vivienda. El coste de las 10.332 viviendas del ayuntamiento sale a un promedio de 96.786 euros. Seguramente las cifras no son exactas, pero aunque sean aproximadas, la diferencia es significativa.

Pero bueno, después he buscado algo más normalito. La Scandinavian Shipping Gazette publica una lista mensual de transacciones de barcos de segunda mano, y allí he encontrado (como ejemplo más práctico) que en enero de este año se vendió el ferry Kronprins Harald, de 32.000 toneladas y con capacidad para 1.432 pasajeros (no hay datos sobre tripulantes) y 700 vehículos, por 43.6 millones de euros. Y se trata de un barco en servicio actualmente en el canal de Kiel, es decir, con motor funcional. El trayecto dura 19 horas y los pasajeros van alojados en camarotes, no en salas comunes. El promedio por camarote todavía es más bajo.

Claro que un camarote no es una casa, y que no puede haber, por ejemplo, cocina (que tendría que ser la común del barco en plan servicio de comedor), pero se puede vivir perfectamente en un camarote, los marinos lo hacen, y la existencia de áreas comunes (comedores, salas e incluso bodegas y garajes) puede cumplir una función comunitaria similar a lo que están proyectando en el barrio ecológico del que me ha hablado Silvia. Parte de tu casa es tuya y hay otra parte que es común, es lo que ya está pasando de hecho en los pisos compartidos.
Después está el tema de donde atracarlo y de los permisos, pero en esto hay un precedente. Durante los juegos olímpicos del 92 se alquilaron once cruceros para que hicieran de hoteles temporales y la cosa funcionó. El año pasado se planteó la idea de atracar un barco-hotel de lujo junto al Forum (aunque no se ha vuelto a hablar). Ahora tenemos un muelle nuevo para los cruceros que no está ocupado gran parte del año, es un buen sitio, y si en la temporada de verano hay un crucero de turistas menos y un barco de barceloneses más, pues los barceloneses salimos ganando. Otro sitio es en el muelle junto al Maremagnum, donde estos días está atracado el barco de la Fura dels Baus, el Naumon (otra idea de aprovechar el puerto para crear un espacio donde hacer cosas) y un yate superluxury que puede hacer sitio perfectamente a un proyecto de interés general. Y otro sitio es junto al Forum, claro. Hay que aprovechar el puerto.
Bueno, no sé si la idea es realmente factible, pero le veo más posibilidades de las que inicialmente pensé. Ante una situación como la que tenemos ahora en Barcelona (con la crisis inmobiliaria se venderán durante un tiempo menos pisos y crecerá la demanda de alquileres) hay que echarle imaginación al asunto, y una posibilidad es vivir sobre las olas (algún amigo mío ya lo ha hecho). En todo caso, nadie me podrá decir que no me preocupo por los problemas de mi ciudad.